jueves, 12 de septiembre de 2013

Senador Pedraza en los 75 años del Colegio Nicolás Esguerra


Aquí se observa al senador Jorge Hernando Pedraza cuando intervenía ante la comunidad esguerrista. También se observa al rector, Arturo Varela y al Mayor General de la Policía Francisco Patiño, quien es egresado de esta institución educativa.


“Esguerrista es el nombre que ufanos llevamos/ cual lábaro sacro, cual prenda de honor”, recitó el senador Pedraza al iniciar sus palabra conmemorativas.


BOGOTÁ. Septiembre 10 de 2013. “Ser exguerrista es ser hombre honesto, buen hijo y amigo y amante de Dios”, dijo el senador Jorge Hernando Pedraza durante su discurso en el acto de celebración del septuagésimo quinto aniversario del Colegio Nacionalizado Nicolás Esguerra, plantel del cual es egresado

El congresista asistió a esta conmemoración invitado por las directivas, en su condición de bachiller ilustre de esa institución.

El senador Pedraza inició su intervención con las dos primeras versos del himno del plantel: “Esguerrista es el nombre que ufanos llevamos/ cual lábaro sacro, cual prenda de honor”. El texto completo del discurso es el siguiente: “Hoy cuando se conmemora el septuagésimo quinto aniversario de la fundación del Colegio Nacional Nicolás Esguerra deseo testimoniar ante los aquí presentes y ante el país, mi orgullo y satisfacción por haber tenido la suerte de cursar mis estudios secundarios en este plantel.

Transitar de nuevo por los pasillos del Colegio me hace recordar tiempos memorables, me alienta el espíritu y renueva el ánimo para continuar adelante en el propósito de servir a la sociedad colombiana. La emoción que sentí hace cinco años cuando tuve la oportunidad de condecorar al Colegio con la Orden del Congreso de Colombia en el grado de Comendador la experimento hoy con igual o superior intensidad. Son fibras muy sensibles las que estimula este claustro.

Confieso que para tener éxito en la vida y a lo largo de mi carrera política han sido fundamentales las enseñanzas, los conocimientos, valores y principios aquí adquiridos.

El Colegio Nacional Nicolás Esguerra se levantó sobre la simiente sólida de la sapiencia de tres lúcidos intelectuales que contribuyeron a la transformación de la educación en Colombia en el siglo pasado: Julio Sieber, Francisco Socarrás y Germán Arciniegas. Ellos fueron sus rectores y mediante el diseño e implantación de modelos pedagógicos innovadores dejaron huella profunda de su acción. Tanto que la calidad educativa lograda entonces ha sido la característica que ha proyectado a esta institución como emblema de la formación de la juventud colombiana.

En el transcurso de los años la estabilidad institucional y y el avance académica se han fortalecido y actualizado. Hoy, por ejemplo, en el Proyecto Educativo Institucional del Colegio Nicolás Esguerra la educación se concibe como un proceso permanente de carácter intelectual, social y personal para propiciar y consolidar en la comunidad educativa un ambiente de aprendizaje que sea lúdico, gratificante, significativo, motivante y dinamizador de oportunidades de desarrollo de una vida plena para las nuevas generaciones. Tales pautas son, sin duda, las que requieren las corrientes intelectuales, tecnológicas y de desarrollo de este mundo cambiante y globalizado.

Al acercarme a las bases filosóficas que sustentan al contemporáneo Colegio Nicolás Esguerra concluyo que aquí se sigue concibiendo al hombre como un ser evidentemente biológico, cultural, espiritual, trascendente y que vive en un universo de lenguaje, de ideas y de conciencia. De ahí que la misión que hoy aparece en prospectos y demás documentos de este establecimiento educativo es coherente con los postulados que lo han distinguido en toda su historia. Sí. El Colegio Nicolás Esguerra siempre ha buscado ser “una escuela de comprensión humana, una institución educativa líder que propicie una sólida formación, lo mismo que el desarrollo de saberes y competencias básicas en niños, adolescentes y jóvenes que contribuya al mejoramiento de oportunidades individuales y colectivas para elevar la calidad de vida de las organizaciones humanas donde ellos participen”.

Felicito a la comunidad esguerrista por mantener vigentes principios, valores, pautas y postulados que se han convertido en su impronta y con los cuales miles de egresados hemos contribuido a construir una Colombia progresista y con futuro amable para todos.

No me cansaré de afirmar mi agrado y satisfacción de ser egresado del Colegio Nacional Nicolás Esguerra.

Ser exguerrista es ser hombre honesto, buen hijo y amigo y amante de Dios”.